A pocas horas de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, los candidatos Barack Obama y Mitt Romney acaban su carrera y se rinden en los Estados más indecisos, llamados los “swing states” con el fin de obtener la mayoría de los votos. El Estado de Ohio es uno de ellos, todavía no tenemos una idea de lo que serán los resultados en este Estado decisivo. Por eso, ambos candidatos terminaran su campaña con un mitin en la capital del Ohio, a unos 10 kilómetros de distancia, antes de regresar cada uno en su sede para esperar a los resultados.


No cabe
duda en que el interés por esas elecciones se refleja en las redes sociales. A
más de 28 millones de personas les “gusta” la página Facebook de Obama, contra 5,5
para Romney. Obama también es mucho más seguido en Twitter, pero ¿significa eso
que Obama ganará con inmensa mayoría, o que los partidarios de Mitt Romney no
tienen Internet?
No creo
que las redes sociales influyan tanto como para cambiar los resultados
de las elecciones. Pero a menudo cuando a una persona le “gusta” una foto de Obama
o de Romney, un amigo llega a comentar y empieza un mini debate. Por
consiguiente, incluso en nuestro mundo “conectado”, al final la política todavía
vuelve a ser política “local”, influenciada por nuestro entorno.
¿Un mormón en la Casa Blanca?
ResponderEliminar¿Que sucedería si Mitt Romney fuera elegido? Los mormones siempre han ocupado puestos importantes en la sociedad, pero a mi parecer, nunca han podido acceder a la Casa Blanca. Son conocidos por ser muy conservadores, y Mitt Romney no es una excepción. En contra del aborto, Mitt Romney declaró que, en caso de violación, las mujeres tenían un sistema de defensa y por eso eran capaces de impedir el embarazo. Eso es un ejemplo de declaración absurda que puede surgir de la libertad de expresión. También nos da una idea de la ideología con la que ha crecido Mitt Romney. Sólo en Estados Unidos puede ocurrir que un miembro de una secta llegue a ser candidato en las elecciones presidenciales.